Cuando se construyó el parque solar fotovoltaico de Beneixama se convirtió en la planta solar más grande de la tierra. Cuenta con una una superficie equivalente a casi 70 campos de fútbol. Su sistema está formado por 100.000 paneles solares y 200 instalaciones que desarrollan una potencia eléctrica de 20 megawatios, con una producción anual de 30.200 megawatios hora de electricidad, correspondientes al consumo energético medio de unos 12.000 hogares. La central solar se ubica en un terreno estratégicamente orientado para obtener el mayor número de horas de sol. La superficie de los paneles solares asciende a 164.340 metros cuadrados.